El baloncesto en Murcia es de todos, no podemos dejarlo morir

Han pasado unos días desde que se confirmara: el CB Murcia jugará en ACB. Pero, a pesar de todo no puedo dejar de pensar en que alguna vez no llegaremos a tiempo y el club desaparecerá, llevándose por delante al baloncesto regional. Sin un club de referencia que participe en las máximas competiciones, el declive está garantizado.
Estoy totalmente convencido, hay muchas cosas que cambiar en el actual modelo de organización, gestión y financiación del deporte en general; no solo en Murcia, en todo el territorio nacional ocurre más o menos lo mismo. Me tengo por un firme defensor de la necesaria unión entre empresa y deporte, porque el deporte no puede estar subvencionado constantemente por las administraciones públicas y debe producirse un cambio. Desde el deporte de base al deporte profesional, empezando por un cambio de mentalidad.
No podemos engañarnos, el dinero público procede de la recaudación -sobre todo de impuestos-, y en estos momentos apenas hay ingresos. Por tanto las administraciones no pueden pagar y el dinero no llega al deporte de base, con el consecuente problema económico-financiero que hace peligrar la subsistencia de numerosos clubes e incluso federaciones deportivas, que no cuentan con recursos propios, ni un ‘plan B’ para autofinanciar su actividad. La mayoría llevan una organización y gestión que debería parecerse cada vez más a la de una empresa, pero lo cierto es que anda bastante lejos de hacerlo.

Las entidades no lucrativas cuentan con interesantes ventajas fiscales -no todo lo amplias que deberían- a la hora de trabajar en la autofinanciación que son útiles para generar recursos propios mediante actividades propias. De ahí que pueden resultar muy interesantes para las empresas a las que hay que atraer al deporte las ventajas fiscales y una inversión en la publicidad positiva que genera estar vinculado al deporte. Es decir, unos gramos de Responsabilidad Social Corporativa. Es precisamente aquí donde la figura jurídica de las fundaciones cobra protagonismo.
Esta falta de unión entre empresa y deporte se refleja claramente en el Club Baloncesto Murcia, un año en ACB y otro en LEB Oro sin contar con una marca pagando por salir en la camiseta, demasiado, pero no estamos tan mal ¿Qué pasa en el mundo del deporte que hay a nuestro alrededor?
Indudablemente, se encuentra en una situación catastrófica, clubes de fútbol y baloncesto incluso en concurso de acreedores, en ACB casos de Alicante, Valladolid o históricos como Joventut o Estudiantes. Y, en fútbol, equipos como Zaragoza, Hércules, Rayo Vallecano o el mismo Atlético de Madrid, con ingresos impensables para el baloncesto -televisión, público o merchandising- pero también gestión dudosa.
Fichajes insostenibles y un factor común, la necesidad de competir con clubes con más recursos. ¿El riesgo? La ausencia de límites. No hay un techo de déficit presupuestario, ni límite salarial, porque primero piensan en el resultado deportivo y cuando vienen mal dadas, en el problema económico-financiero que tienen encima.
Por ello, la labor del CB Murcia, de administraciones públicas y de la sociedad de Murcia es darle vida al baloncesto. Si realmente queremos, podemos. El vehículo debe ser la vinculación empresa y deporte, la clave sin duda la afición, pues necesitamos una masa social muy fuerte #objetivo5000. Los dueños del club han dado una inequívoca muestra de compromiso con la ciudad y con el baloncesto y el consejero de Cultura y Turismo, Pedro Alberto Cruz , se expresaba con contundencia, si no llenamos el Palacio de los Deportes algún día dejará de haber baloncesto en Murcia.
La afición responderá, con seguridad, si el club nos da lo que necesitamos: espectáculo y sentimiento murciano. A quien le gusta el deporte lo practica, quien paga un carnet de socio, lo hace porque quiere consumir baloncesto como un espectáculo. Va a divertirse y a sentirse vinculado con los chicos que hay en la cancha.
Eso sí, es imprescindible buenos fichajes, jugadores que se identifiquen con la ciudad y mucha cantera. Necesitamos jugadores murcianos, es necesario tener escuelas de baloncesto en cada pedanía del municipio de Murcia y la iniciativa tiene que partir del CB Murcia con el apoyo de la Federación de Baloncesto, del ayuntamiento y de los muchos apasionados por el deporte del baloncesto que tenemos muchas ganas de ayudar en lo posible a que en Murcia tengamos más baloncesto. Y, por qué no, mejor baloncesto.